domingo, 15 de febrero de 2009

Y si fuera cierto....




¿Y si fuera cierto que está llegando el fin del mundo?
¿Y si fuera cierto todo lo que se escucha de cumplirse las profecías?
¿Y si fuera cierto que en el 2012 todo se acaba?
Para unos el fin del mundo es la extinción de la Humanidad, para otros un cambio en la manera que vivimos, pero ¿cómo ocurrirá?
Un desastre nuclear, un meteorito impactará contra el planeta, el calentamiento global, un virus mortal, nos invadirán los extraterrestres, una guerra mundial... Será como Sodoma y Gomorra. ¡Quién sabe!
Desde que vi en Cuarto Milenio un programa especial sobre la catástrofe de Chernóbil "La noche del fin del mundo" me surgen algunas dudas ¿fue una tragedia presagiada? ¿Fue en verdad, el comienzo del fin del mundo? ¿Está relacionada la hierba del ajenjo con la estrella que San Juan menciona en el Apocalipsis?








¿Qué haríamos si un día nos despertásemos con la certeza que en unos tres años se acaba el mundo? ¿Seguiríamos viviendo como hasta ahora? ¿Intentaríamos hacer todo lo que nos apetece? ¿Le daríamos vacaciones a nuestro gran amigo el estrés y viviríamos relajados el tiempo que nos queda?

Yo seguro que seguiría como hasta ahora, perdiendo el tiempo. No sabemos lo que el destino nos tiene preparado, probablemente no acabe el mundo en 2012 pero, y si fuera cierto ¿tú que harías?

jueves, 12 de febrero de 2009

Jugar a ser niña



Cuando era pequeña yo también hacía burbujas, echaba agua y jabón en un vaso y soplando por un extremo de un boli bic vacio las formaba. Me pasaba el rato haciéndolas, grandes, muy grandes, pequeñas, diminutas. Ahora lo que quiero es ser una de ellas y huir, despacio como ellas, silenciosa como ellas.
De niña he jugado a ser bailarina, actriz, profesora, mercera y no sé cuantas cosas más. Cuando eres una muchachita juegas a ser mayor, y ahora que soy mayor quiero jugar a ser niña. Evadirme de los problemas, enamorarme otra vez, hacer burbujas, saltar a la comba, jugar al rescate, rozar con los dedos sus labios, el primer beso, la primera vez, amar y ser amada, escuchar su voz. Nunca he jugado a ser princesa, ahora está muy de moda entre las niñas, todas quieren serlo, pues yo nunca lo fui. Me hubiera encantado disfrazarme de Anastasia y soñar que bailaba con el hombre de mis sueños, en una sala enorme de un bonito palacio. Pero me conformo con ver la película un millón de veces y seguir soñando.